(Expansión) – Un muro virtual se fortalece en la frontera entre Estados Unidos y México y pasa desapercibido. Se trata de una barrera creada en Estados Unidos a partir del uso de tecnología para la detección de drogas, armas, migrantes y dinero, e impedir su paso a ese país desde México.
“Del tema no se habla mucho, incluso ya se concursa en programas pilotos para un muro virtual. Este funcionará con sensores, radares, cámaras de videovigilancia”, cuenta a Expansión, Nelson Balido, CEO del Border Commerce & Security Council de Estados Unidos, organización sin fines de lucro enfocada en temas de seguridad fronteriza.
Con el uso de tecnología se busca que esta barrera haga el mismo trabajo, o hasta mejor, que una barrera física, agrega el especialista en seguridad fronteriza.
El interés y los recursos están puestos. El Congreso de Estados Unidos recién autorizó 1.500 millones de dólares para reforzar la seguridad en la frontera, para terminar el año fiscal 2017, el cual culmina el próximo 30 de septiembre.
La condición de los demócratas fue que no se utilizara ni un dólar en la construcción del muro físico que Donald Trump prometió en su campaña.
Para el año fiscal 2018 el presidente de Estados Unidos, solicitó 2.600 millones de dólares, para “aumentar la infraestructura y tecnología enfocada en la seguridad fronteriza”, refiere la propuesta de presupuesto, denominada “La Nueva Fundación para la Grandeza Americana”.
Los recursos serán “para invertir en operaciones tácticas de alta prioridad, incluyendo el financiamiento para planificar, diseñar y construir una pared física a lo largo del sur”, refiere el documento dado a conocer el martes pasado.
“No necesariamente se va a ver ese muro, a nadie le gusta el muro de concreto, u otro muro, porque ya tenemos casi 800 millas hechas”, dice Balido.