(CNN) – Un hombre cristiano-israelí es acusado de haber apuñado a su hija hasta matarla porque, según las autoridades, ella tenía una relación con un musulmán que el padre no aprobaba.
Los fiscales aseguran que Sami Karra, de 58 años, la asesinó dentro de la casa familiar en Ramla, una ciudad ubicada en el centro de Israel, apenas un día después de que ella se graduara de la secundaria.
La víctima, Henrriette Karra de 17 años, mantenía una relación sentimental con un hombre musulmán, en contra de la insistencia de sus padres, de acuerdo a la acusación criminal presentada esta semana ante un tribunal israelí.
A finales de mayo, Henriette había abandonado la casa familiar después de recibir amenazas y abusos por parte de sus padres, agregó el documento. Por un tiempo, estuvo quedándose en la casa de la madre de su novio.
La familia de Henriette intentó que regresara a través de amenazas dirigidas contra ella y la mamá de su pareja para presionarla, según la acusación.
La madre del novio, quien no fue identificada por el expediente, llamó a la Policía para que interviniera a favor de Karra. Pero la joven se negó a aceptar la ayuda de las autoridades y se rehusó a regresar a casa.
Un mes después, cuando Henriette se encontraba en la casa de una amiga, su padre llegó y empezó a golpearla mientras la amenazaba, explicó la acusación.
“Así como ya pasé por la cárcel, estoy dispuesto a quedarme en la cárcel el resto de mi vida. No me importa”, fueron las palabras que supuestamente Karra le gritó a su hija.
Dos días después de una reunión con una trabajadora social, Henriette regresó a su casa. Y el pasado 12 de junio celebró su graduación del colegio con una fiesta.
A la mañana siguiente fue a la oficina de correos a enviarle 100 dólares a su novio, quien se encontraba en prisión por un delito sin especificar y debía salir libre a finales de esa semana.
Cuando regresó a casa, Henriette le anunció a uno de los miembros de su familia que estaba preparada para convertirse al islam.
Y entonces esa persona le contó a su padre las intenciones de Henriette. Apenas Karra se enteró de la noticia, relató el expediente, tomó un cuchillo y apuñaló a su hija tres veces, asesinándola.
El padre fue arrestado unas horas después.