(CNN) – Oír los comentarios de quien es indiscutiblemente el villano más grande en la historia del Tour de Francia sobre la carrera que dominó por tanto tiempo es un placer culposo en la edición de este año.
Lance Armstrong está de vuelta en el ciclismo, en cierto modo. Aún siendo un paria en el deporte, creó un podcast diario grabado desde una pequeña oficina al final del jardín de su casa de Austin, y en ocasiones desde otros lugares cercanos.
El exciclista de 45 años está muy bien informado, como cabría esperarlo de un veterano de trece Tours. Los temas han variado ampliamente, desde criticar a los organizadores de la carrera por ponerle fin a la etapa de la reina del Tour con un descenso traicionero hasta tener una resaca como resultado de beber demasiado vino rosado durante sus celebraciones del 4 de julio.
Recién publicado su más reciente podcast, titulado “Stages” (“Etapas”), Armstrong le dice a CNN: “Tenía dos plataformas antes (su mea culpa pública por el dopaje de hace cuatro años): el ciclismo y el cáncer”.
LEE: Qué sustancias usó Lance Armstrong para doparse y qué provocan
“No estoy diciendo que estén bien o mal, pero pasaron de la noche a la mañana, no sólo el ciclismo, sino el cáncer. Un hombre sin plan de vida está perdido”.
Este no es el primer podcast de Armstrong. Durante los últimos meses, ha tenido uno llamado “The Forward” (“El Futuro”), en el que han sido invitados personajes desde el autor Malcolm Gladwell hasta el exmariscal de campo de la NFL Brett Favre.
Aunque esto ha sido bien recibido, Armstrong ha sido impresionado tanto por los números de audiencia y la positiva retroalimentación de su última aventura en las ondas, en la que comparte el escenario con el anfitrión radial JB Hager.
Al momento de hablar con CNN, estaba teniendo un promedio de 300.000 oyentes al día (el doble de “The Forward”), y el número iba en aumento. A pesar del enorme disgusto de los organizadores del Tour, ha sido sin duda uno de los éxitos de la carrera.
“No me preocupa la negatividad”
Puede que su pasado manchado por el dopaje le haya traído alguna retroalimentación negativa. “Mi equipo se ocupa de los correos electrónicos y estoy seguro de que hay un montón de ellos en los que me dicen “¡Vete a la m…!”, asegura.
“Pero no estoy demasiado preocupado por la negatividad. Si alguien quiere insultar y atacarme personalmente, no me afecta. Si se trata de un comentario sobre algún detalle del programa, entonces intentaré arreglarlo”.
LEE: David Walsh, el hombre que expuso el dopaje de Lance Armstrong
“Los comentarios en Facebook Live, Twitter e Instagram han sido buenos”.
“Stages” es sólo parte del regreso de Armstrong al ciclismo. En los meses previos a la carrera, volvió a subirse a su bicicleta por cuestión de ejercicio, y volvió a ponerle atención a lo que acontece en la actividad profesional.
Armstrong lista algunos de los comentarios que ha recibido. “Me escribieron un mensaje que decía ‘no quería escuchar pero lo hice y es bueno’. También tienes gente que te dice ‘no me gustaría’. Un tipo por ahí lo calificó como ‘su placer culposo’”.
Pero el siete veces ganador del Tour, cuyas victorias en la carrera han sido borradas de los anales por su pasado de dopaje, sabe que su regreso a la bicicleta no será bien recibida por todos.
“Es la primera vez en años que tengo algo que me devuelva un plan de vida”, asegura. “La gente puede escoger no escuchar, pero en esto soy mi propio jefe y nadie me dice qué hacer”.
La pregunta es cual es el próximo plan para Armstrong. Ha tenido algunas conversaciones con interesados en lo relativo a su futuro.
Pero llevar su podcast a Francia el próximo año no está en la agenda. Por un lado, él sabe con toda seguridad que estaría en la lista negra.
LEE: ¿Cómo es la vida de Lance Armstrong tras el escándalo de dopaje?
“Hey, nunca digas nunca jamás, ¿verdad?” asegura. “Pero tengo muy poco interés en hacer eso, puedo ver el Tour en mi casa y luego caminar hacia mi estudio”.
“Dios bendiga a los que están en el Tour, que tienen que manejar tres horas todos los días entre las etapas. Eso es miserable, necesitas unas vacaciones al final. Lo que estoy haciendo en este momento me funciona de perlas”.