(CNN) – Nada arruina más las conversaciones a la hora de almorzar que un teléfono inteligente en la mano.
Y McDonald’s cree que tiene la solución para combatir nuestra adicción moderna.
La cadena de comida rápida instaló unos casilleros para celulares en una de sus sucursales en Singapur para animar a sus clientes a que se den un descanso del mundo virtual y tengan conversaciones reales durante sus comidas.
La campaña conocida como “Apaga el teléfono, enciende la diversión” introdujo los primeros 100 casilleros transparentes en el McDonald’s de Marine Cove.
Según una encuesta a 302 padres de familia hecha por McDonald’s en Singapur, la mayoría (98%) dijo que usan su dispositivo móvil cuando están en familia y más de dos tercios de ellos admitieron usar sus teléfonos durante las comidas. La mayoría de los padres también dijeron que sus hijos usan el teléfono durante el tiempo en familia.
“Esta iniciativa forma parte de nuestros esfuerzos para defender la unidad familiar y alentar a las familias a que compartan tiempo de calidad en familia”, dijo Linda Ming, directora de comunicaciones y atención al cliente de McDonald’s en Singapur.
Aunque el público primordial al que va dirigido el servicio son las familias, el servicio es gratuito para todo el que quiera usarlo.
Según una encuesta publicada a principios de este año, cerca del 70% de los menores de 12 años en Singapur usan un teléfono y gastan en promedio 6,5 horas diarias en dispositivos electrónicos.
Esta no es la primera vez que los restaurantes tratan de desalentar el uso de los teléfonos móviles a la hora de la comida. A principios de este mes, un restaurante en el sur de Francia ocupó los titulares al prohibir a sus clientes usar sus celulares. Los meseros silban y muestran una tarjeta amarilla cuando alguien usa su teléfono celular.
McDonald’s dijo que está recolectando información de su sucursal de Marine Cove antes de decidir si expande su servicio a otras sedes.