(CNNMoney) – Cumplir las resoluciones de Año Nuevo puede ser un gran desafío, debido a todo el esfuerzo que exigen. Pero, aquí te traemos un enfoque mucho más fácil de seguir.
Simplemente tienes que dejar de cometer estos cinco errores financieros. ¿El resultado? Conseguirás mayores ahorros, unos hábitos de gasto más inteligentes y una identidad segura durante el próximo año. ¿Preparado?
1. Deja de ahorrar lo que te sobra
Ahorrar no debería ser una idea de última hora. De hecho, deberías adoptar el modelo de “paga tú primero”, que es una forma de batalla probada para aumentar tus ahorros.
No esperes a fin de mes para saber exactamente lo que te quedó y ahí sí añadirlo a tus ahorros. Esta estrategia tiende a ser, en el mejor de los casos, insignificante y arbitraria y, en el peor, apenas una sensación de culpa porque estás en ceros. En lugar de eso, configura una transferencia automática que, cada vez que entre el pago a tu cuenta, moverá la misma cantidad de dinero a tus ahorros.
¿Cuánto deberías apartar para este fin? En caso de que no lo sepas: lo ideal es que ahorres entre el 10% y 20% de tu salario neto anual. Sin embargo, tu primera tarea es tener al menos 1.000 dólares en una cuenta de ahorros para tu fondo de emergencia.
Plan de acción: decide el monto que vas a reservar en casa periodo de pago. Después, ve a la página web de tu banco y configura la transferencia automática para que se ejecute durante el día en que te llega el sueldo.
2. Olvídate de los pagos fáciles (y sin dolor)
Todos los días, los almacenes y los sistemas de pago están reestructurando los procesos para que puedas pagar más rápida y fácilmente.
Pero, entre más te alejes del acto de pagar (que es doloroso), más probable es que termines gastando una mayor cantidad de dinero, según Dan Ariely, economista del comportamiento y coautor del libro Dollars and Sense.
“Si se trata de una deducción automática, no experimentas el fastidio de la misma manera y eres menos consciente de los gastos”, explicó.
Si te obligas a ti mismo a pagar en efectivo, o al menos a ingresar el número de tu tarjeta de crédito cada vez que compras algo en línea, estarás en contacto con el dolor de pagar. Lo que te ayuda a recordar que adquirir algo en este momento también significa no ahorrar para más adelante.
Plan de acción: paga en efectivo o con cheque, cuando sea posible. No guardes el número de tu tarjeta de crédito en la computadora, en las páginas web de los almacenes o en billeteras virtuales. Evita los sistemas de pago con un solo clic.
3. Deja de guardar silencio sobre el dinero
Las investigaciones demuestran que no sólo somos malos manejando el dinero, sino que también fracasamos al hablar sobre él.
Aún así hay buenas noticias: los estudios también revelan que entre más hablamos de eso, tenemos mayor confianza y más información disponible para tomar mejores decisiones financieras.
Además, las personas jóvenes son mejores compartiendo y comparando sus victorias y fracasos financieros que otros grupos.
El hecho de conversar con otras personas sobre dinero, nos hace más conscientes del ahorro invisible que algunos están haciendo en comparación con sus gastos más visibles. También nos ayuda a tomar decisiones financieras más informadas y con menos estresantes, cuando nos tomamos el tiempo para preguntarles a nuestros amigos sobre sus estrategias con el dinero.
Plan de acción: discute tus ahorros para la jubilación con tu círculo más cercano. Después, pregúntales a tus mejores amigos sobre su salario. Incluso, también podrían compartir y comparar aplicaciones.
4. Dile adiós a tus compras al por mayor
Las compras en tiendas al por mayor te hacen gastar y comer más, según lo reveló una reciente investigación.
Las personas que compran en almacenes como Costco, BJ’s o Sam’s Club gastan más en comida empacada, realizan más a la tienda y consumen más calorías de alimentos empacados, que si no hicieran sus comparas en un almacén de este tipo.
Los investigadores descubrieron que, además de no estar ahorrando, aumentas tus gastos de alimentos envasados en 3,50 dólares por persona cada mes.
Puede que esta cifra parezca insignificante y que no afectará tu presupuesto, pero “si estás buscando ahorrar dinero, vas en la dirección opuesta”, indicó el profesor de Dartmouth el autor principal del estudio.
Plan de acción: haz tus compras semanalmente en supermercado y así evitarás gastar de más. Si ya tienes una membresía en estos lugares al por mayor, escribe una lista y síguela al pie de la letra.
5. No permitas que tu crédito esté disponible para cualquiera
La noticia sobre el hackeo a la información de Equifax –en el que se accedió a los datos personales y financieros de 145 millones de personas– ha desaparecido de tus redes sociales y de los titulares, pero el riesgo de robo de identidad aún permanece.
Si no verificaste para saber si fuiste una de las personas afectadas en septiembre pasado, cuando se anunció el hackeo, deberías hacerlo inmediatamente.
Independientemente de si tu información quedó al descubierto o no, deberías poner un congelamiento crediticio en tus tres reportes de crédito. Esta estrategia te permite seguir usando tu crédito existente y tus acreedores actuales pueden acceder a los archivos, pero nadie más puede ver tu reporte y –lo más importante– no se pueden establecer nuevas líneas de crédito.
Si deseas abrir una nueva línea de crédito, deberás descongelar tu crédito.
Desafortunadamente, los congelamientos creidticios no son gratuitos para todos, pero la pequeña tarifa que deberás pagar será diminuta en comparación con el dinero que puedes llegar a perder y a los dolores de cabeza que sufrirías en caso de que se roben tu identidad.
Plan de acción: para establecer un congelamiento de crédito, ve a la página de congelamiento en el sitio web de cada empresa de crédito individualmente: Equifax, TransUnion, Experian.