Nota del editor: Samantha Vinograd es analista de seguridad nacional de CNN. Trabajó en el Consejo de Seguridad Nacional del presidente Barack Obama de 2009 a 2013 y en el Departamento del Tesoro del presidente George W. Bush. Sígala en @sam_vinograd. Las opiniones expresadas en este artículo son propias de la autora.
(CNN) – Cada semana, ofrezco un vistazo sobre el tipo de evaluaciones de inteligencia que probablemente llegarán al escritorio del presidente de EE.UU. Diseñado sobre el Informe diario presidencial, que el director nacional de inteligencia prepara a diario para el presidente, mi Informe diario presidencial se concentra en los asuntos que el presidente debe saber para tomar decisiones informadas.
Este es el informe semanal:
Un beso francés, con ciertas condiciones
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, no ha ocultado sus esfuerzos por seducirlo. Ha estado detrás de usted desde su primera reunión en Bruselas, Bélgica, el año pasado y a ese encuentro le siguió su invitación a Francia el Día de la Bastilla. Él quiere una relación seria, pero cuando llegue a Washington el lunes —la primera visita de Estado de un líder extranjero en este gobierno— vendrá con una agenda personal y política significativa.
Tiene fuertes vientos en contra en Francia; su nivel nacional de aprobación está en el punto más bajo desde que asumió el poder, y solo el 40% de la población francesa afirma tener una opinión favorable de Macron, una caída de 12 puntos porcentuales desde diciembre. Su nivel de aprobación ha ido disminuyendo por su impulso a las reformas políticamente sensibles del sector público.
Él ha descrito la relación entre ambos como “directa y sincera”, pero sabe que usted no es una figura popular en Francia (las encuestas muestran que usted tiene allí un nivel de aprobación del 14%). Así que querrá hacer parecer como que obtuvo algo por invertir tiempo, esfuerzo y paciencia con su relación “inquebrantable” y querrá mostrar que él y Francia, se están convirtiendo cada vez más en el centro neurálgico al cual acudir en el continente. Macron intenta posicionarse como mediador global, incluso frente a los palestinos, los sirios, los rusos, los libaneses, y a nivel personal, querrá que usted reconozca su papel.
Macron tendrá una larga lista de temas en su agenda incluyendo:
● Rusia. Hablemos claro. Macron no languidece ante Rusia. Ha instado al diálogo con Rusia sobre Siria y Francia ha alzado la voz sobre la intromisión rusa en las elecciones en Francia, sus continuas actividades ilegales en Ucrania, y el envenenamiento en el Reino Unido de un ex doble agente ruso Sergei Skripal y de su hija. Macron probablemente intentará que usted condene también el mal comportamiento mundial de Rusia en curso, a la vez que apoya el diálogo para reducir las tensiones en Siria. Francia podría hacer más. Francia no ha sancionado a los oligarcas rusos, como hizo el gobierno recientemente, así que usted podría utilizar las reuniones para urgirle que repase toda herramienta de presión, ya sea financiera o diplomática, o de otra índole. Abrir la participación en las sanciones a otros países, podría transformarlas de simbólicas en impactantes.
● Siria. Quédese allí: quizás Macron crea que el camino a Damasco pasa por el diálogo con Moscú, pero no quiere que reduzcamos nuestra presencia militar en Siria en el futuro cercano. En determinado momento, se atribuyó el mérito de persuadirlo a mantener fuerzas estadounidenses en Siria, así que es claro que quiere aparentar ser el que decide, algunas veces al menos. Querrá reafirmar la misión estadounidense actual en Siria, y quizás sea un buen momento para aclarar - en privado, no en público - cuáles son, de hecho, las líneas rojas en el uso futuro de armas químicas. Francia sigue siendo un aliado en nuestra campaña más amplia contra ISIS y en privado usted podría pedirle recursos adicionales, de ser necesario, en Siria u otras partes, en particular dado que Francia viene sufriendo ataques inspirados por ISIS desde hace varios años.
● Irán. Este acuerdo es mejor que ningún acuerdo. Macron criticó su decisión de retirarse unilateralmente de convenios como el Acuerdo sobre Cambio Climático de París, y lo empujará a que evite retirarle la certificación al acuerdo con Irán el 12 de mayo. Él sabe que los pedidos del gobierno estadounidense sobre cambios al acuerdo no han sido finalizados aún con las otras partes y que la fecha límite para la validación de Estados Unidos será dentro de unas semanas. Probablemente, él mencionará el acuerdo de Irán cuando se dirija a una sesión conjunta del Congreso esta semana. El domingo, admitió que no tiene un “plan B” si abandonamos el acuerdo, así que probablemente será muy enérgico para convencerlo de que este acuerdo es mejor que no tener ningún acuerdo, y probablemente vendrá a Washington provisto de algunas concesiones de otros signatarios. (Angela Merkel de Alemania, se unirá probablemente a él en esto, cuando se reúna con usted el viernes). Las nuevas sanciones europeas contra Irán podrían ser parte del paquete europeo combinado para “quedarse en el acuerdo”.
● Comercio. Los amigos quieren beneficios: luego de visitar Berlín el jueves para coordinar su visión con Merkel, Macron lo instará a abandonar su proclividad a realizar anuncios de comercio unilaterales, como los aranceles al aluminio y al acero que casi dan paso a una guerra comercial antes de que se anunciaran las exenciones. Probablemente intentará que usted acepte extender las exenciones arancelarias a la Unión Europea y querrá que esto se anuncie públicamente.
Notablemente, Merkel estará con usted en la Casa Blanca, unos días después de la visita de Estado de Macron. Probablemente están coordinando su planteamiento sobre todos estos temas.
Kim Jong Un tiene una lista de intenciones para la cumbre
Hubo entusiasmo, hasta en Twitter, luego del anuncio de que Corea del Norte suspenderá las pruebas nucleares y misilísticas y que cerrará un sitio nuclear. Nuestra evaluación es que esto no fue, en esencia, una muestra conciliatoria de buena fe. Kim hizo este anuncio porque quizás ya no necesite realizar más pruebas; ha logrado que su programa nuclear y misilístico llegue a donde quiere que esté. La declaración oficial de Corea del Norte señala que “bajo las condiciones plenas demostradas de las armas nucleares, ya no necesitamos ninguna prueba nuclear, ni pruebas de cohetes balísticos de alcance medio e intercontinentales, y que el sitio de prueba nuclear en la zona norte también ha completado su misión”.
Si bien la sincronización de este anuncio probablemente tuvo la intención de generar buena voluntad antes de la cumbre de Kim con el presidente Moon de Corea del Sur esta semana, no es una bandera blanca norcoreana. De hecho, podría ser una jugada para sentar las bases para que se reconozca a Corea del Norte como potencia nuclear. ¿La clave para Corea del Norte?
Las pruebas, que quizás ya no sean necesarias, están detenidas, pero no lo está el resto del programa nuclear y de misiles.
Añada este anuncio a la actual reconciliación de Kim con Moon, desde los Juegos Olímpicos hasta K-Pop , él ha propuesto algunos acercamientos amistosos. En la fase previa a su reunión el viernes en la zona desmilitarizada, los dos líderes coreanos hasta instalaron una línea telefónica directa entre sus oficinas, por primera vez.
Sin duda, Moon desea que la cumbre intracoreana sea un éxito; dedicó mucho, personalmente, en este “avance” diplomático. Pero con todo este aparente impulso positivo, aún existe la duda, ¿qué quiere Kim Jong Un?
Es peligroso suponer que un líder tan paranoico como Kim Jong Un - un líder que participa en tantas actividades perversas - haya tenido una epifanía y que de repente haya decidido abrir su país al mundo sin pedir nada a cambio. Aun si él, de hecho, cree que enfocar su país hacia el crecimiento económico y que mejorar la economía nacional es el mejor camino a futuro, todo es una negociación, y todos quieren algo, incluyendo Kim Jong Un.
Es probable que considere esta cumbre con Moon y su cumbre con usted, señor presidente, como parte de una secuencia más grande, así que tenemos que evaluar qué cosa figura en su lista combinada de intenciones para las cumbres:
● Kim pone a Kim primero: primero y principalmente, a Kim Jong Un le importa él mismo, y la confianza de que está a salvo de un cambio de régimen (o peor) será el prerrequisito para que él entable una conversación de manera seria. Aun si él realmente tiene la intención de desnuclearizar, querrá garantías inquebrantables de que todo esto no es una trampa para sacarlo del poder. Recuerde que no creemos que él siquiera haya salido de Corea del Norte desde 2011 hasta su viaje reciente a Beijing, debido a una paranoia arraigada respecto de intentos de asesinato. Si Mike Pompeo no entregó una garantía de seguridad a Kim cuando se reunieron durante el fin de semana de Pascua, Kim estará buscando una antes de que realmente ceda en algo.
● Él quiere ser el rey de la fiesta nuclear: en la gira de publicidad iniciada en enero, vimos cuanto le gusta ser protagonista, y queda claro que busca atención con desesperación. El ser reconocido internacionalmente como potencia nuclear ha estado en su lista de prioridades desde hace rato, y si va a aceptar un desmantelamiento completo, verificable, e irreversible, primero querrá que el mundo reconozca que, a pesar de las limitaciones increíbles, pudo alcanzar la capacidad nuclear que ha eludido a tantos otros. Él no entregará los materiales si no reconocemos antes que pudo desarrollarlos.
● Quiere llenar su cuenta bancaria: no hay duda de que las sanciones internacionales, lideradas por este gobierno, han menoscabado y limitado la habilidad de Kim de gastar y de financiar proyectos nuevos. Miles de millones de dólares en comercio internacional han sido bloqueados, y Kim tiene hábitos de gasto caros, que incluyen productos de lujo y sus fuerzas militares. En un país en que el 70% de sus 25.100.000 habitantes tiene “inseguridad alimentaria” y la desnutrición crónica es endémica, Kim gasta una cantidad desproporcional de dinero en gastos de defensa. El último presupuesto de Corea del Norte (que probablemente es más propaganda que un verdadero presupuesto) pone el gasto de defensa a el 15,8 % de su PIB, pero los analistas ponen la cifra actual a un nivel mucho más elevado; Corea del Norte tiene una de las fuerzas militares convencionales más grandes del mundo.
También habló sobre buscar reformas como abrir zonas económicas especiales para las cuales necesita atraer inversores extranjeros (las sanciones imposibilitan eso). Kim querrá que se levanten algunas sanciones por lo menos y, en su lugar, querrá una asistencia económica directa para que pueda continuar con su estilo de vida lujoso y pueda sustentar sus proyectos personales preferidos, desde el aspecto militar a los centros de esquí y las visitas de celebridades.
● Quiere ser el Unificador en jefe: Kim habló en el pasado sobre reunificar la península (quizás a su imagen y semejanza macabra), y ahora que se aproxima la cumbre intracoreana y luego la cumbre con usted, consideramos que tomará medidas para acercar a los dos Coreas. Estos pasos podrían incluir más reuniones entre las familias separadas por la Guerra de Corea y un final formal a la guerra misma. Acorde a su necesidad de recibir elogios y adoración, es probable que Kim quiera reconocimiento público, como el unificador de la península coreana.
Sin cigarros cubanos
En la superficie, los cubanos fueron testigos de una transferencia histórica de mando la semana pasada. Raúl Castro cedió la presidencia a su sucesor escogido a mano, Miguel Díaz-Canel, quien fue elegido por la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba (no tuvo mucha oposición - fue el candidato único). Pero este es un tigre de papel: Raúl Castro no se irá a ninguna parte. Aún mantiene el cargo más importante del país: jefe del Partido Comunista, así que el fin de la era de tener a un Castro como presidente, no significa que las políticas de un presidente Castro serán tiradas por la borda. El jefe del Partido Comunista en Cuba es la “fuerza líder de la sociedad y del Estado”. El partido, no el presidente, está al mando.
En su discurso de despedida (unos meros 90 minutos comparados con los largos monólogos que prefería su hermano Fidel), Castro dijo que Díaz-Canel servirá dos mandatos de cinco años y luego asumirá el cargo de presidente del Partido Comunista en 202. Así que podríamos tener que hacerle frente, como mínimo, a otros años con un Castro a cargo del Partido Comunista.
Díaz-Canel y la mayoría de los miembros de los órganos gubernamentales tienen vínculos cercanos con los Castro, así que no deberíamos esperar acciones atrevidas de parte de Díaz-Canel, sin el consentimiento de Castro. Sus vínculos con los Castro existen desde hace décadas y hasta estuvo asignado a su equipo de guardaespaldas durante la Guerra Fría.
Castro sí realizó algunas reformas en Cuba, incluso permitir que los cubanos viajen, una apertura diplomática con EE.UU. con el entonces presidente Obama, e incluso permitió algún desarrollo de la libre empresa en el estado socialista. Estas reformas, así como también las futuras, tuvieron que ser aprobadas por el Partido Comunista. Así que aun si Díaz-Canel quisiera arriesgarse, el partido sería un control a sus ambiciones.
A pesar de la transferencia de mando, el futuro del pueblo cubano aún recae en un Castro. La pregunta actual es si el mismo Raúl Castro aceptará alguna liberalización política o económica o acciones en dirección hacia el estado de derecho. Sin su autorización, Díaz-Canel no tendrá capital político, influencia ni un camino para buscar nada diferente de lo que ya hemos visto.