(CNN) – No han pasado ni seis meses desde que la historia de los 13 hermanos Turpin en California sorprendió al mundo por su crueldad: durante años sus padres los torturaron, los mantuvieron encadenados y los privaron de alimentos. Ahora, un nuevo caso de abuso sale a la luz. Se trata de 10 hermanos, entre los 4 meses y 12 años, a quienes sus padres sometieron a ahogamientos con agua, mordiscos y quemaduras con agua hirviendo en su casa al norte de California, según revelaron fiscales en documentos judiciales.
Las acusaciones quedaron registradas en una moción que este martes presentó la Fiscalía del condado de Solano, en un intento por aumentar la fianza para la madre de los niños, Ina Rogers, antes de su comparecencia ante el tribunal este miércoles.
Tanto Rogers, de 30 años, como el padre de los menores Jonathan Allen, de 29 años, enfrentan acusaciones por negligencia en menores, tortura y abuso que involucran a sus hijos, después de que los niños les relataran a los investigadores que fueron víctimas de heridas punzantes, quemaduras y moretones, además de lesiones consecuentes con disparos de pistolas de perdigones o de pistolas de aire comprimido.
En marzo pasado, las autoridades registraron la casa de la pareja en Fairfield, tras llevar de regreso a uno de los niños que había sido reportado como desaparecido. La policía de la ciudad señaló que hallaron condiciones repugnantes en el hogar, incluyendo excrementos de humanos y de animales regados por el suelo.
“Durante la investigación, los niños describieron ampliamente los incidentes de abuso. Continuamente, los niños fueron golpeados, estrangulados, mordidos, víctimas de disparos con armas como ballestas y pistolas de aire comprimido, golpeados con palos y bates, sujetos de ahogamientos con agua y de quemaduras con agua hirviendo que les derramaban encima”, escribió la fiscal del distrito Verónica Juarez al solicitarle a un juez que fijara la fianza de Rogers en 495.000 dólares.
Este martes, Rogers fue acusada en nueve cargos de abuso infantil, según una demanda enmendada. La mujer ya había enfrentado un delito menor por crueldad infantil. Se declaró inocente y su fianza quedó fijada en 495.000 dólares.
Allen, quien fue acusado este lunes en nueve cargos de abuso infantil así como en siete de tortura, también se declaró inocente. Su fianza es de 5,2 millones de dólares. Tanto Allen como Rogers están bajo custodia.
“Obviamente, los cargos contra el señor Allen son muy serios y los tomamos en serio. Son, por supuesto, simples acusaciones en este momento. Se presume que el señor Allen es inocente y se ha declarado inocente. Tenemos la absoluta intención de impugnar vehementemente estas acusaciones, pero tenemos la intención de apelar estas acusaciones en la corte y no a través de los medios”, señaló el abogado de Allen, Tommy Barrett, en un comunicado.
CNN se ha comunicado con el abogado de Rogers.
Rogers y Allen han negado cualquier delito en entrevistas con medios locales.
“Me esfuerzo y me enorgullezco de ser un buen padre para mis hijos”, le dijo Rogers le dijo a la afiliada de CNN KGO/KTXL.
Sonya Hamasaki de CNN contribuyó a este informe