(CNN) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, planeaban reunirse en Singapur el 12 de junio, y hasta hace unos días, todo parecía ir por buen camino.
Luego, la cumbre se canceló. Luego se reactivó. Ahora, no sabemos.
¿Sigue en pie la cumbre Trump-Kim? Quién sabe, pero con esto deberías quedar actualizado de lo que está pasando… por ahora.
¿Cómo llegamos aquí?
Hasta hace dos semanas las cosas parecían avanzar según se planeaban. Ambas partes habían anunciado que la cumbre histórica (un presidente de Estados Unidos en ejercicio nunca se ha encontrado con un líder norcoreano) tendría lugar el 12 de junio en Singapur.
La primera señal de que algo estaba mal se dio el 15 de mayo, cuando el líder norcoreano canceló abruptamente una reunión de alto nivel con Corea del Sur. Pyongyang dijo que no estaba contenta con los ejercicios militares conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur.
La retórica se volvió frenética el jueves cuando un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte dijo que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, era un “títere político” por repetir una referencia al “modelo de Libia” respecto a las conversaciones con Corea del Norte.
El modelo de Libia se refiere al acuerdo que el líder libio Moamar Gadhafi hizo para renunciar a sus armas nucleares, solo para ser derrocado por rebeldes apoyados por Washington años después. En las mismas declaraciones, Pyongyang amenazó con un enfrentamiento nuclear.
Los funcionarios estadounidenses dijeron que el ataque personal a Pence y la amenaza de una guerra nuclear fue la gota que rebasó la copa.
Trump canceló la cumbre este jueves en una carta a Kim, citando la ira de la retórica hostil y en medio de las preocupaciones sobre el compromiso de Corea del Norte de renunciar a sus armas nucleares.
¿Cómo reaccionaron las Coreas a la decisión de Trump?
El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in (que estuvo en Washington para hablar sobre Corea del Norte con Trump la semana pasada), convocó a una reunión de emergencia en la mitad de la noche una vez Trump canceló la reunión.
Moon se veía sombrío en una foto que publicó. Fue citado diciendo que estaba “perplejo por la decisión”.
Corea del Norte luego sorprendió a muchos respondiendo al movimiento explosivo de Trump sin insultos ni fanfarronadas. En un comunicado del viernes un alto diplomático dijo que Pyongyang lamentó la decisión de Washington de rechazar la cumbre y dijo que aún estaba dispuesto a sentarse con Estados Unidos.
Trump pareció tomar estas declaraciones de una manera generosa y les dijo a los reporteros que pensaba que el comunicado era “muy amable” y que Washington iba a seguir las conversaciones con Pyongyang.
Incluso dio a entender que la cumbre aún podía ocurrir el 12 de junio.
“Todo el mundo hace juegos. Ustedes saben”, les dijo Trump a los reporteros cuando le preguntaron sobre los diálogos. “Ustedes saben eso más que nadie”.
¿Confundidos? También lo están los coreanos
Kim Jong Un, al parecer, no estaba seguro de qué hacer con todo esto.
El viernes en la tarde, hora coreana, contactó a Moon y dijo que quería reunirse con él en persona (ambos tuvieron su primera cumbre a finales de abril).
Moon aceptó y los dos se sentaron a hablar este sábado en la tarde, un tiempo notablemente corto para organizar una reunión de tan alto nivel. Esta es solo la cuarta vez en la historia que líderes de las dos coreas se han encontrado cara a cara.
La reunión se mantuvo en secreto hasta que terminó.
Moon informó a los reporteros sobre su reunión con Kim diciendo que ambas partes aún estaban comprometidas a avanzar.
Y Trump dijo al finalizar este sábado en Washington —casi a la misma hora que Moon estaba hablando con los reporteros el domingo en Seúl— que “estamos esperando el 12 de junio en Singapur. Eso no ha cambiado y está avanzando muy bien”.
Un grupo de diplomáticos estadounidenses viajaron a Pyongyang el domingo para diálogos preparatorios, mientras un grupo separado de funcionarios de Washington viajaron a Singapur para planear la logística.
¿Aún está planeada la cumbre?
En este momento, al parecer sí, con base en los comentarios de Trump del sábado en la noche. Pero eso no significa que de hecho vaya a pasar, como ha quedado demostrado los últimos días.
Después de todo, este es un presidente que sin arrepentimientos, se salta el libro de reglas cuando se trata de diplomacia. Las negociaciones con Corea del Norte parece no ser la excepción.
Y como lo dijo la estrella de televisión convertida en presidente: “veremos qué pasa”.