(CNN Español) – El éxodo de venezolanos ha convertido a Colombia en su refugio y no tiene tintes de detenerse. En menos de un mes, 50.000 de ellos ingresaron a este país vecino huyendo del lugar en el que nacieron. Y la cifra ya se acerca al millón: 870.093 venezolanos se encuentran en territorio colombiano, según reportó este miércoles Migración Colombia en su balance del primer semestre de 2018.
De hecho, el director de la entidad, Christian Krüger, sentenció: “La cifra sigue creciendo y en la medida en que la situación de Venezuela se agudice pues va a seguir creciendo”. Prueba de ello, explicó, es que a 7 de junio Migración Colombia tenía un total de aproximadamente 819.000 venezolanos, una cifra mucho menor a la de 870.093 que se registró a corte de 30 de junio y que acaba de ser revelada. Eso representa un incremento del 5% en apenas semanas. Incluso, esta cifra significa un incremento del 58% respecto al número de venezolanos en Colombia en 2017.
En ese sentido, Krüger indicó que el reto más grande está en “incorporarlos a la vida productiva del país”, porque de los contrario “no estamos haciendo nada sino multiplicando el fenómeno de un país en otro”.
Sin embargo, para lograrlo es necesario resolver el estatus legal de los migrantes venezolanos. De todos los que se encuentran en Colombia apenas 381.735 están en situación regular. Eso es aproximadamente el 43,87%, menos de la mitad. De los restantes, 442.462 (o el 50,85%) se encuentran inscritos en el Registro Administrativo de Migrantes Venezolanos y están en proceso de regularizarse, mientras que 45.896 (5,27%) permanecen en situación irregular.
“Hemos venido trabajando por regularizar a los ciudadanos venezolanos que se encuentran dentro del territorio nacional, porque somos conscientes que el tenderles la mano no es solamente permitirles estar en Colombia”, aseguró Krüger. De ahí que el Gobierno de Colombia, según informó, esté próximo a expedir un decreto para poder regularizar a los 442.462 que están en proceso hacerlo. Se trataría de una medida similar al Permiso Especial de Permanencia (PEP), que es exclusivo para venezolanos. Este permiso tiene una vigencia de 90 días que puede renovarse automáticamente hasta cumplir 2 años y les da a los migrantes la posibilidad de trabajar y afiliarse al sistema de salud. Sin embargo, no equivale a una visa.
Una vez que se firme el decreto y se complete el proceso de regularización, Migración Colombia afirma que la situación del 94% de los venezolanos en el país quedaría normalizada. “Esta es una forma real de darle la mano a una población migrante”, aseguró el director de la entidad. “Aquí lo que estamos buscando es incorporar toda esta población a la vida productiva de Colombia: que puedan trabajar en las mismas condiciones de un colombiano, que ganen lo mismo que un colombiano, que se puedan afiliar a un sistema de seguridad social, que tengan las mismas condiciones”. Por eso, en los próximos días la entidad abrirá sus sistemas de registros para este fin.
¿Dónde están?
La mayoría de venezolanos se encuentran en Bogotá, que acumula el 23,5% de esta población. Le sigue el departamento de La Guajira, en la punta norte de Colombia, con el 11,7% y muy de cerca Norte de Santander, al oriente del país, con el 11,4%. Después se ubican Atlántico, en la costa Caribe, con un 9,7% y Antioquia, en el centro norte del país, con 7,6%.
Migración Colombia también indicó que los principales destinos para los venezolanos que no se quedan en Colombia son Ecuador, Perú, Chile y Argentina. “La migración se está dando sur-sur, de Colombia hacia el sur del continente. La migración hacia centro y Norteamérica se ha disminuido en un gran porcentaje”, aseguró el director de Migración.
Los que huyen, literalmente, caminando
El fenómeno migratorio de quienes huyen de Venezuela hacia Colombia y otros países no ha sido igual en el tiempo. Como lo explicó Krüger, se trata de una situación evolutiva que se puede caracterizar en tres grandes momentos. El primero, hace unos seis o siete años, fue la “migración que salió que tenía cierto poder adquisitivo”, lo que le permitió incorporarse fácilmente a la vida productiva de un país. La segunda etapa, tres o cuatro años atrás, está marcada por migrantes con un “perfil académico interesante”, que fue aprovechado por las naciones de destino. “Ingenieros de petróleo, por ejemplo, médicos especialistas con algunas características. A muchos países les atraen esos perfiles y los han ido incorporando”, indicó el director de Migración.
Finalmente, está la fase que vemos actualmente y que Krüger describió como “una migración que no tiene recursos económicos”. Es ahí donde menciona una situación impactante: hay población, aproximadamente 30.000 personas, que ingresa a Colombia caminando, atravesando trochas y que cuando no se queda en en este territorio, algo que sucede muchas veces, continúa igualmente su tránsito a pie. “Es un fenómeno que nos preocupa, que puede atentar contra la integridad de las personas, son trayectos muy largos que los están haciendo vía terrestre”.
Krüger detalló que parte de las razones que llevan a las personas a huir de esta manera tiene que ver con lo escaso del salario mínimo en Venezuela. Situación que les impide salir en un bus y mucho menos en avión. También está “el tema de los pasaportes, no tienen formas de adquirir pasaportes”. Lo que provoca que “esta población que quiere salir de su país, no por gusto sino por necesidad, tenga que utilizar estos caminos, estas vías terrestres, caminando, para llegar a otros destinos”.
Los venezolanos también llegan a Colombia buscando atención en salud
El deterioro de la salud en Venezuela también ha cruzado fronteras con los migrantes: desde 2015 el número de atención en urgencias se disparó. Solo en lo corrido de 2018, se han presentado 47.892 casos, lo que prácticamente duplica el total de 2017: 24.727. Pero, si se compara esta última cifra con la de 2016 vemos que el incremento fue de más de 20.400 casos: pasando de 4.258 atenciones a 24.727.
“Esto muestra un deterioro de la atención en salud en Venezuela. Están llegando nuestro país para ser atendidos en salud”, explicó Krüger.