Nota del editor: Camilo Egaña es el conductor de Camilo. Las opiniones expresadas en este artículo son exclusivas del autor.
(CNN Español) – Cuando un periodista o un periódico es noticia, casi siempre algo anda mal. Casi siempre.
Era cuestión de tiempo que una cosa como la que voy a contarles ocurriera. Robert Chain, de 68 años, fue detenido en California por agentes de FBI y acusado de amenazar, al menos en 14 ocasiones, a los empleados del periódico The Boston Globe por ser —y lean bien esto por favor— “el enemigo del pueblo”, la maldita y vergonzosa frase con la que el presidente Donald Trump intenta descalificar e indisponer entre los suyos a la prensa que no le celebra lo que hace y lo que dice que hace.
El Boston es un gran periódico, serio, meticuloso y progresista. Suficiente para que Trump le embista una y otra vez.
El 16 de agosto, numerosos diarios de todo Estados Unidos, desde los más grandes y poderosos hasta los más pequeñitos y vulnerables, hicieron suya la iniciativa de The Boston Globe de publicar ese día editoriales que advertían de los peligros que corre la libertad de prensa en el país por el desprecio y la violencia cada vez más evidente de Trump hacia los medios de comunicación.
Respuesta inmediata de Trump: ese mismo día calificó a la prensa de “partido de la oposición”.
Si el hombre que amenazó 14 veces al periódico resultara condenado, podría pasar cinco años en la cárcel y tendría además que pagar una multa de 250.000 dólares.
Es el modo en que la sociedad castiga a uno de sus ciudadanos, pero ¿qué hacemos con el presidente?
¿Qué más tendrá que pasar para que el presidente abandone sus desplantes, sus amenazas, sus ataques, su escandalosa incivilidad, su falta de empatía?