(CNN) – Erika Peña todavía está asustada y alterada días después de que lograra escapar de las manos de un supervisor de la Patrulla Fronteriza acusado de una serie de asesinatos en el sur de Texas, dice su familia.
La madre de 26 años estaba el viernes en una camioneta con Juan David Ortiz, un veterano de 10 años de la Aduana y Protección Fronteriza de Estados Unidos, cuando este apuntó con una pistola hacia ella y ella luchó hasta que pudo escapar y encontrar un policía estatal, dijeron las autoridades.
“Es un milagro que esté viva”, dijo su hermano Cesar Alberto Villarreal.
Las autoridades pudieron encontrar a Ortiz con la ayuda de Peña y finalmente lo arrestaron en el estacionamiento de un hotel. Pero la familia de Peña no quiere que nadie ignore el trauma que soportó.
“Sí, para unos ella es un héroe, pero no le quita el hecho de que ella también fue una víctima en esta tragedia. Ella es una sobreviviente pero está pasando por un trauma grave”, dijo la tía de Peña, Marcela Rodríguez.
Peña tiene una hija de 5 años y ha vivido en Laredo toda su vida. Ella es conocida por su sonrisa y personalidad extrovertida, dice su familia, pero ahora, no quiere estar sola y a veces llora mientras duerme.
“Va a necesitar asesoramiento y ayuda de profesionales. Todavía está en shock”, dijo Villarreal.
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El sospechoso pensó que a nadie le importaría, dijo la familia
Rodríguez dijo que habían escuchado sobre el caso pero que no sabían nada de lo que le había pasado a Peña cuando los agentes del sheriff la llevaron a su casa el sábado.
“La trajeron a casa. No sabíamos nada, que ella fue la que escapó”, dijo Rodríguez.
La familia de Peña cree que Ortiz se aprovechó de una comunidad vulnerable. Confesó haber matado a cuatro mujeres entre el 3 de septiembre y la madrugada del sábado, a todas las cuales recogió en un centro de prostitución de Laredo.
Él ha sido acusado de cuatro cargos de asesinato y un cargo de retención ilegal y asalto agravado con arma mortal, dijeron las autoridades.
“Cualquiera que sea su trabajo o lo que sea que estén haciendo, son seres humanos”, dijo Rodríguez. “Pensó que no tenían una casa donde vivir, parientes a los que ir, o que nadie los buscaría. Que a nadie le importarían”.
El martes, el jefe adjunto Federico Garza de la oficina del Sheriff del condado de Webb dijo a los periodistas que no confiaba en que las autoridades hubieran identificado a todas las víctimas de Ortiz.
Tres de las víctimas han sido identificadas como Melissa Ramírez, 29, Claudine Luera, 42, y Humberto Ortiz, 28. Humberto Ortiz era una mujer transgénero, según la Policía. Ortiz también se hacía llamar Janelle, dijo un portavoz del fiscal de distrito del condado de Webb. CNN está intentando confirmar el nombre y el pronombre preferidos de la víctima.
Las autoridades no divulgan el nombre de la cuarta víctima hasta que sus parientes hayan sido notificados.
La familia planea avanzar buscando atención médica para Peña. También tienen la intención de contratar un abogado, aunque no quiso especificar qué tipo de acción legal planean tomar.
– Nicole Chávez de CNN contribuyó a este informe.