Hong Kong (CNN Business) – Carlos Ghosn salió de una cárcel de Tokio el miércoles después de pasar más de tres meses detenido por acusaciones de delitos financieros.
Ghosn, exjefe de Nissan y Renault, salió de un centro de detención después de pagar una fianza de 1.000 millones de yenes (9 millones de dólares), según imágenes de la emisora pública japonesa NHK. Las imágenes lo mostraban llevando una gorra azul, gafas y una máscara facial, que dejaba ver muy poco de su rostro al salir del edificio.
Las condiciones de su libertad bajo fianza requieren que se quede en Japón y sea vigilado de cerca. Una apelación hacha por los fiscales contra la decisión de dejarlo salir fue rechazada el martes por la noche.
Ghosn, una de las figuras más prominentes en la industria automotriz global, se encuentra a la espera de un juicio acusado de reportar a la baja sus ingresos durante años y haber abusado de su posición al transferir pérdidas de inversiones personales a Nissan.
Su caída y detención prolongada conmocionaron a la industria automovilística internacional, provocaron tensiones entre Nissan y Renault y generaron dudas sobre el sistema de justicia penal de Japón.
Ghosn ha negado cualquier delito. Si lo encuentran culpable, podría enfrentar hasta 15 años en prisión.
“Estoy muy agradecido con mi familia y amigos que me han apoyado en esta terrible experiencia”, dijo Ghosn en una declaración el martes. Contrató a un nuevo equipo de defensa japonés el mes pasado después de que las solicitudes de fianza anteriores fueran rechazadas.
Desde el arresto de Ghosn en Tokio el 19 de noviembre, ha sido destituido como jefe de Nissan, Renault y Mitsubishi Motors, a las que había reunido para formar la mayor alianza de fabricantes de automóviles del mundo. El grupo fabrica uno de cada nueve autos vendidos en todo el mundo y emplea a más de 450.000 personas.
Los familiares y abogados de Ghosn han criticado repetidamente las condiciones de su detención. Dicen que ha pasado meses en régimen de aislamiento y que ha perdido mucho peso.
Los abogados de Ghosn en Francia dijeron esta semana que habían presentado un informe a las Naciones Unidas, alegando violaciones de los derechos fundamentales de Ghosn durante su larga detención. Dicen que fue retenido en condiciones “inhumanas”.
Los fiscales japoneses dicen que Ghosn, como otros sospechosos, ha sido tratado de manera justa de acuerdo con la ley.
Ghosn será vigilado por cámaras de vigilancia y enfrentará restricciones en el uso de su computadora mientras esté bajo fianza, según su abogado, Junichiro Hironaka. Tampoco puede tratar de destruir la evidencia en el caso.
A Ghosn se le atribuye el hecho de haber alejado a Nissan del colapso financiero hace 20 años y se convirtió en un líder empresarial icónico en Japón. En enero dijo que su arresto era el resultado de un complot de otros ejecutivos de Nissan, quienes se opusieron a su plan para profundizar la integración de la compañía japonesa con la francesa Renault.
Un portavoz de Nissan se negó el martes a comentar sobre la decisión del tribunal de otorgarle la libertad bajo fianza a Ghosn.
Kaori Enjoji, Yoko Wakatsuki y Junko Ogura contribuyeron con este informe.