Nota del editor: En esta columna semanal de CrossExam (Contrainterrogatorio), Elie Honig, analista jurídico de CNN y ex fiscal federal y estatal, brinda su visión sobre las últimas novedades en cuestiones jurídicas. Las opiniones expresadas en este comentario son propias del autor.
(CNN) – Elie Honig responderá a sus preguntas en CNN.com sobre juicio político a medida que avance la indagatoria.
Dave (Kansas): Si someten a Trump al juicio político y lo destituyen, y Mike Pence se convierte en presidente, entonces ¿cómo se elige al nuevo presidente?
La vigésima quinta enmienda, que fue ratificada en 1967, estipula dos aspectos: en primer lugar, (para esta hipótesis, Pence) seleccionaría al nuevo vicepresidente y, en segundo lugar, esa persona debe ser confirmada entonces por mayoría de votos de la Cámara de Representantes y del Senado.
Unos años después de su aprobación, la enmienda fue puesta en práctica dos veces. En 1973, el vicepresidente Spiro Agnew renunció en medio de una investigación federal por soborno, el presidente Richard Nixon seleccionó a Gerald Ford como el nuevo vicepresidente, y Ford fue confirmado por la Cámara de Representantes y el Senado. Después en 1974, Nixon renunció durante el escándalo de Watergate. Ford se convirtió en presidente y seleccionó a Nelson Rockefeller como vicepresidente, quien fue confirmado por ambas cámaras del Congreso.
Alison (Tennessee): ¿Qué puede hacer la Cámara de Representantes para hacer cumplir sus citaciones si testigos como Rudy Giuliani y Mike Pompeo se rehúsan a acatarlas?
La Cámara de Representantes tiene estas tres vías legales tradicionales, todas ellas problemáticas.
En primer lugar, teóricamente, la Cámara de Representantes tiene su propio poder inherente de acatamiento, pero ha quedado inactivo después de casi un siglo de desuso. La Cámara de Representantes no tiene una fuerza de policía capaz de realizar arrestos –el sargento en armas es principalmente una fuerza de seguridad– ni instalaciones carcelarias funcionales.
En segundo lugar, la Cámara de Representantes puede remitir una causa para su procesamiento penal. Pero esa remisión iría al Departamento de Justicia de Barr, y es poco probable que éste último levante cargos penales dado su patrón de proteger a Trump y a aquellos que lo rodean.
En tercer lugar, la Cámara de Representantes puede presentar una demanda civil en una corte. Pero esto se demoraría meses en resolverse, y la Cámara de Representantes básicamente no tiene el lujo del tiempo para litigar.
Pero la Cámara de Representantes se está volviendo creativa… y dura. Schiff ha notificado a los destinatarios de citatorios de que sacará una “inferencia adversa” si no cumplen. En otras palabras, dará por sentado que su falta de respuesta significa que el testimonio hubiera sido perjudicial para los acusados. En segundo lugar, la Cámara de Representantes puede imponerle un artículo de juicio político por obstrucción al Congreso; de hecho, uno de los borradores de los Artículos de juicio político contra Nixon fue por obstrucción al Congreso.
Carlos (Florida): ¿El Congreso puede someter a Trump a un juicio político basándose únicamente en documentos como la denuncia del informante o el informe del fiscal especial Robert Mueller?
Sí. El artículo primero de la Constitución le otorga ampliamente a la Cámara de Representantes el “poder exclusivo de juicio político”, pero no dice nada en absoluto sobre cómo debe llevarse a cabo el proceso, ni qué tipo ni qué cantidad de evidencia es necesaria para el juicio político. Esto es distinto a los juicios penales federales, que se rigen por reglamentos específicos de procedimientos, reglas de evidencia y el requisito de que el fiscal pruebe la culpabilidad del acusado más allá de cualquier duda razonable.
De hecho, cuando la Cámara de Representantes sometió al presidente Bill Clinton al juicio político en 1998, lo hizo basado únicamente en el informe escrito del fiscal independiente Ken Starr y las pruebas materiales. La cámara de Representantes no llamó a ningún testigo presencial ni presentó evidencia adicional.
Dicho eso, la Cámara de Representantes llevará a cabo su propia investigación del escándalo de Ucrania durante las próximas semanas. Pelosi ha anunciado que cada una las seis principales comisiones -del poder judicial, de inteligencia, de medios y arbitrios; de supervisión, de servicios financieros y de relaciones exteriores– investigará y luego enviará recomendaciones a la Comisión del Poder Judicial, que a su vez decidirá si recomienda que la Cámara de Representantes vote los artículos de juicio político (y en ese caso, cuáles).
Semejante investigación parece innecesaria aquí porque muchas de las preguntas clave del escándalo de Ucrania aún están sin responder. Por lo tanto, la investigación de la Cámara de Representantes será crucial para determinar si existe un fundamento adecuado para el juicio político.
Kenneth (Maryland): El artículo II sección 2 de la Constitución dispone que el presidente “tendrá el poder de otorgar Conmutaciones e Indultos de Delitos contra Estados Unidos, salvo en Casos de Juicio Político”. Ahora que los demócratas de la Cámara de representantes iniciaron los procedimientos contra Trump, ¿todavía puede emitir indultos?
Sí. El presidente puede emitir indultos en casos penales hasta el momento en que deja su cargo. De hecho, muchos presidentes han emitido indultos en sus días y horas finales en el cargo, probablemente porque los indultos tienden a ser políticamente impopulares.
Si bien el presidente tiene el poder constitucional de indultar crímenes federales –“delitos contra Estados Unidos”— no puede otorgar indultos por juicio político. Entonces, si el presidente o cualquier otro funcionario federal es sometido a juicio político por la Cámara de Representantes y luego sentenciado por el Senado, no hay nada que él (ni nadie más) pueda hacer para revertirlo. No hay modo de apelar o revertir un juicio político.
Vikki (Illinois): ¿La Cámara de Representantes podría llevar a cabo una investigación formal de juicio político y luego votar para censurar al presidente, en vez de someterlo a juicio político y enviarlo al senado –controlado por los republicanos- para el juicio?
La académica constitucional Laurence Tribe ha propuesto un procedimiento similar diseñado para crear un registro formal de la conducta de Trump en la Cámara de Representantes controlada por los demócratas sin enviar el tema al Senado controlado por los republicanos para lo que muchos consideran como un voto inevitable partidario de exoneración.
Bajo la propuesta de Tribe, la Cámara de Representantes realizaría una investigación de juicio político, otorgándole a Trump el derecho a preparar una defensa. La Cámara de Representantes luego votaría una resolución que declararía acusable al presidente, lo que Tribe considera “mucho más fuerte que una simple censura”, pero no avanzaría el asunto al Senado para un voto formal sobre la destitución del cargo.
La propuesta de Tribe tiene cierto mérito. Promovería la comprensión pública de la conducta de Trump y crearía un registro histórico importante. Según escribe Tribe, la Cámara de Representantes actuaría “de manera coherente con su obligación primordial de establecer que ningún presidente está encima de la ley…sin establecer el precedente peligroso de que un presidente corrupto pueda salirse con la suya sin ningún tipo de límite, siempre y cuando tenga un Senado obediente que lo respalde”.
Veo dos argumentos en contra del enfoque de Tribe. En primer lugar, es una evasión del proceso establecido por la Constitución: la Cámara de Representantes vota para someterlo a un juicio político, luego el Senado celebra un juicio y vota por exonerarlo o por condenarlo y destituirlo del cargo. En segundo lugar, el enfoque de Tribe no cumple con las expectativas. Si bien la Cámara de Representantes lo haría solamente de manera formal, el resultado final (como mucho) sería una resolución muy severa que condena al presidente, pero sin ninguna penalidad (como la destitución al cargo).
Zhiliang (Chile): Durante la indagatoria por el juicio político, ¿la Cámara de Representantes investigaría solamente el asunto de Ucrania u otros potenciales delitos de Trump también?
El artículo I de la Constitución le otorga ampliamente a la Cámara de Representantes “el poder exclusivo de juicio político” sin imponer ningún límite de alcance (según señalé en la anterior pregunta) ni de tiempo. Por lo tanto, la definición del alcance de su investigación y, eventualmente, de cualquier artículo de juicio político depende por completo de la Cámara de Representantes. Si bien el enfoque principal de esta investigación estará puesta en el escándalo de Ucrania, los demócratas de la Cámara de Representantes no padecen de una escasez de temas para considerar: los hallazgos del fiscal especial Robert Mueller sobre la interferencia rusa a la elección y la obstrucción a la justicia; los emolumentos y autoenriquecimiento, y la obstrucción al Congreso, por nombrar tres.
Por ahora, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, está mirando las investigaciones de la Cámara de Representantes desde un punto de vista más amplio. Ha anunciado que cada una de las seis comisiones principales de la Cámara –la del Poder Judicial, la de Inteligencia, la de Medios y Arbitrios, la de Supervisión y la de Asuntos Internacionales– investigarán y luego enviarán recomendaciones a la Comisión del Poder Judicial, que a su vez decidirá si recomienda que el pleno de la Cámara de Representantes vote los artículos de juicio político (y de ser así, cuáles).
Si bien Pelosi ha ordenado investigaciones amplias de parte de las comisiones, también le dijo a los demócratas en privado que ella tiene la intención en última instancia de enfocarse de forma restringida en el escándalo de Ucrania para los artículos de juicio de político. Este es un paso táctico hábil de parte de Pelosi: mantiene abiertas sus opciones, mantiene partícipes a varias comisiones de la Cámara de Representantes en su junta política, mantiene la apariencia de considerar todas las opciones. Aun si resiste la estrategia de Pelosi y los eventuales artículos de juicio político se enfocan exclusivamente en Ucrania, ella jugará su mano más fuerte sin desviar la atención al incluir temas más complejos y que potencialmente distraen más.
John (Illinois): ¿Cuánto tarda el proceso de juicio político?
Legalmente, no hay límite de tiempo para el proceso de juicio político. Esto es en contraste con el proceso de la justicia penal, que limita la cantidad de tiempo que puede pasar entre que se comete el delito y la acusación (“plazo de prescripción”) y el tiempo entre la acusación y el juicio (reglas de “juicio sin demora”).
En sentido práctico y político, sin embargo, el Congreso sabe que el tiempo avanza. Los legisladores actuales estarán en su cargo hasta el 2021, así que cualquier proceso de juicio político deberá y sin duda concluirá para ese momento (aunque los próximos legisladores pueden continuar cualquier indagatoria pendiente si lo consideran adecuado). Y, por supuesto, una elección presidencial se aproxima en noviembre 2020.
A medida que se aproxime la elección, los procesos de juicio político se volverán cada vez más conflictivos y políticamente tensos. Los líderes de la Cámara de Representantes entienden que tienen que actuar de manera rápida. Tanto Pelosi como el presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, se han comprometido a actuar “de manera expeditiva”, y el presidente de la comisión del Poder Judicial, Jerry Nadler, ha declarado “la marcha a toda velocidad.”
La cronología del juicio político de Bill Clinton brinda una guía útil. La Cámara de Representantes inició la indagatoria de juicio político oficial en octubre de 1998 y sometió a Clinton al juicio político en diciembre de 1998. El senado luego realizó el juicio a Clinton, que resultó en su exoneración, en enero y febrero de 1999. Parece razonable ahora que el Congreso repita el paso bastante acelerado de los procedimientos del caso de Clinton.
Por ahora, el Congreso tiene un calendario político aún más apretado: en el caso Clinton, faltaba poco menos de dos años para la próxima elección presidencial (en noviembre de 2000), mientras que ahora falta poco menos de un año para la próxima elección presidencial (en noviembre de 2020). El tiempo será esencial para los demócratas.
Stevens (Virginia): ¿El juicio político debe estar basado en un delito codificado en las leyes?
No. El Congreso ciertamente puede -y quizás debe- iniciar un juicio político si el presidente ha cometido un crimen. Pero incluso si la conducta de Trump esquiva las gotas de las leyes y no cumple del todo con la definición de delito federal, el juicio político básicamente es una solución al abuso del poder constitucional.
La Constitución prescribe juicio político por “traición, soborno, u otros altos crímenes y delitos menores”. Pero el término “altos crímenes y delitos menores” no está definido en ninguna parte de la Constitución ni de las leyes, y parece haber sido tomada de la práctica parlamentaria británica, que contempla el juicio político por crímenes o por conducta que excede el alcance de la ley penal establecida.
Nuestros propios antecedentes apoyan la noción de que no se requiere un crimen para el proceso de juicio político. El presidente Andrew Johnson fue sometido a juicio político por la Cámara de Representantes (y luego absuelto por el Senado) por despedir al Secretario de Guerra, lo que ciertamente no es un acto criminal. Los artículos redactados de juicio político contra el presidente Richard Nixon incluyeron el abuso del cargo y el uso indebido del cargo público, mientras uno de los artículos propuestos de juicio político contra el presidente Bill Clinton (que votó en contra por unanimidad de toda la Cámara de Representantes) se relacionaba con el abuso de su cargo relacionado con una conducta no delictiva.
Sean (Wisconsin): ¿Puede el líder por la mayoría del Senado, McConnell, rehusarse a realizar el juicio en el Senado, si la Cámara de Representantes vota los Artículos de juicio político?
El Sen. Mitch McConnell ha declarado que si la Cámara procesa a Trump, él “no tiene opción” sino realizar el juicio en el Senado. Pero queda por verse si esa promesa se mantiene a medida que continúe la investigación, en especial si sigue aumentando el rencor partidario.
Algunos observadores han teorizado que McConnell podría de hecho decidir no realizar el juicio. La Constitución ampliamente otorga al Senado el “poder exclusivo de procesar todos los juicios políticos” y, según el argumento, McConnell podría interpretar ese amplio poder para incluir el poder de no proceder.
Pero los efectos secundarios de semejante decisión serían, legal y políticamente, enormes. Legalmente, yo esperaría que los demócratas objetaran la decisión de no realizar el juicio como una violación de la Constitución. Y políticamente, sería una movida tremendamente riesgosa para McConnell dar la impresión de que está intentando cortocircuitar el proceso Constitucional y dejar los Artículos de juicio político esencialmente colgados como una serie de acusaciones no refutadas.
McConnell tiene, sin embargo, amplia discreción sobre cómo se llevaría un juicio en el Senado. La Constitución esencialmente especifica solo dos procedimientos en particular: que el presidente de la Corte Suprema (en este caso, John Roberts) debe presidir, y que se necesitan dos tercios de los votos para la sentencia y remoción. Fuera de eso, dependerá prácticamente de McConnell completar los espacios del procedimiento.
Larry (California): si el presidente es llevado a juicio político por la Cámara y hallado culpable por el Senado, ¿esto lo inhibe de postularse al cargo en el futuro? ¿Podría Trump ser sometido a juicio de destitución, removido de su cargo y luego postularse en el 2020?
La Constitución establece que una sentencia de juicio político provoca “la remoción del cargo, y la descalificación para mantener o disfrutar de cualquier cargo de honor, confianza o remunerado bajo Estados Unidos”. Por lo tanto, evidentemente, la Constitución parece estipular que, si una persona es enjuiciada por la Cámara de Representantes, sentenciada por el Senado y removida de su cargo, también quedará descalificada para mantener un cargo en el futuro.
Pero algunos académicos legales han argumentado que el Senado debe votar por separado sobre (1) la remoción del cargo y (2) la descalificación para mantener un cargo futuro. Repasando los precedentes históricos, el Senado al menos dos veces votó para remover jueces federales y luego separadamente votó sobre si descalificar a los jueces de acceder a cargos en el futuro. Y si bien se requieren dos tercios de los votos del Senado para la remoción, el Senado ha usado el estándar del voto por mayoría simple en casos anteriores de descalificación.
Entonces, si el Senado votó para sentenciar y remover al presidente, probablemente votaría por separado sobre si impedirle acceder a otro cargo en el futuro.
Steven (Nueva Jersey): Es verdad que, si el Congreso trae un caso de juicio político al Senado, y el Senado presenta un veredicto de “no culpable”, luego al retirarse del cargo, ¿Trump no podría ser procesado penalmente por excepción de cosa juzgada?
No, esto no es así, si bien Pelosi una vez hizo esa implicancia cuando se supone que les dijo a los demócratas en la Cámara: “no quiero ver a (Trump) procesado por juicio político, quiero verlo en prisión”.
De hecho, el juicio político y el procesamiento penal son dos procesos totalmente distintos, que responden a distintos propósitos. El juicio político es un proceso político prescripto por la Constitución para remover al presidente o a otros funcionarios federales de su cargo, separado de los cargos penales. Un presidente puede ser acusado por la Cámara de Representantes y sentenciado por el Senado, pero nunca ser acusado penalmente después.
Por el contrario, un presidente puede ser llevado a juicio político por la Cámara, absuelto (hallado no culpable) por el Senado, y luego ser acusado penal y formalmente al dejar su cargo. De todos modos, la excepción de cosa juzgada no impediría el procesamiento porque el juicio político no es un proceso penal, y por lo tanto no califica como un “primer” juzgamiento, por así decirlo.
Traducción de William Montes