(CNN) – Fidencio Sánchez, el querido vendedor de paletas de Chicago cuya ética de trabajo infatigable y su generoso corazón cautivó a muchos, murió esta semana. Tenía 92 años.
Su amigo Joel Cervantes Macías, y Manny Martínez, de Martinez Funeral Home, confirmaron su muerte a CNN. Dulce Sánchez, la nieta de Fidencio, confirmó su muerte al Chicago Tribune.
Durante años, Sánchez recorrió las calles de Little Village de Chicago con un carrito de helados lleno de frías paletas.
Sánchez, que quedó huérfano a los 6 meses, trabajó para mantenerse desde los 13 años, primero en Morales, México, y luego, desde 1990, en Chicago.
Las imágenes del hombre de 89 años encorvado sobre su carro, luchando por empujarlo, contaron una conmovedora historia: su esposa ya no podía trabajar con él, y la hija que cocinaba para ellos todos los días murió en 2016, así que trabajaba por necesidad.
Ese mismo año, Joel Cervantes Macías conoció a Sánchez, le compró 20 paletas y comenzó una recolección de fondos en GoFundMe con la esperanza de recaudar lo suficiente para ayudar a Sánchez a retirarse.
En pocas semanas, miles de personas de todo el mundo donaron casi 400.000 dólares para el hombre de las paletas.
Sánchez le dijo a CNN en 2016 que estaba “muy agradecido y muy feliz” por el inesperado apoyo.
Vivió modestamente hasta la jubilación
Aunque Sánchez inicialmente consideró comprar una casa o invertir en audífonos para las personas con problemas de audición con sus fondos de jubilación, continuó viviendo modestamente, dijo Macías. Se quedó en el departamento que compartía con su esposa, aunque compró un auto nuevo.
Disfrutaba de actividades que antes no podía permitirse, dijo Macías. Cenaba en un buffet chino con su esposa un poco más a menudo y visitaba museos con más frecuencia de lo que solía hacerlo.
Pero, sobre todo, Sánchez finalmente se retiró.
Macias le dijo a CNN que se hizo más cercano a Sánchez y su familia desde que se conocieron en 2016. Asistían a reuniones en la iglesia de Sánchez juntos y regularmente hablaban por teléfono.
A principios de este año, Sánchez se cayó y se rompió la cadera, dijo Macías. A partir de ahí, el líquido acumulado en sus pulmones y la sepsis complicaron su salud.
La nieta de Sánchez llamó a Macías inmediatamente después de su fallecimiento. Macías compartió la noticia en Facebook, donde se ha compartido más de 1.500 veces.
“Todos han visto a su abuelo en él, o su padre”, dijo. “Me dio una nueva y agradable mirada a la humanidad”.
– Rosa Flores de CNN contribuyó a este informe.