(CNN) — Costa Rica es conocida por ser el hogar de algunos de los animales más lindos del mundo como los perezosos y los ocelotes.
Pero la autoridad turística del país quiere que los visitantes lleguen a observar los animales no a cargarlos ni tocarlos.
El Instituto Costarricense de Turismo está detrás de la campaña llamada #StopAnimalSelfies. Se trata de una respuesta al número creciente de turistas que visitan Costa Rica buscando tomarse fotos para con animales silvestres para publicar en Instagram.
“Nuestros visitantes deben saber el impacto negativo que tienen las selfies y las fotografías que muestran un contacto directo con animales salvajes”, le aseguró a CNN Travel Pamela Castillo, viceministra del Ministerio de Ambiente y Energía de Costa Rica (MINAE).
“Nuestro objetivo y responsabilidad, como líderes mundiales en temas ambientales, es educar y motivar a los nuevos embajadores mundiales comprometidos con la protección de la vida silvestre”, agregó.
Detrás de la campaña
El Instituto Costarricense de Turismo se asoció con el departamento de Castillo en la iniciativa.
Además de pedirles a los turistas ser respetuosos con los animales salvajes cuando visitan Costa Rica, las dos entidades también están invitando a los visitantes a posar con animales de peluche en lugar de animales reales y a usar el hashtag #stopanimalselfies y la frase “no maltrato animales salvajes para una selfie” en sus fotos.
Más allá de que posiblemente los animales se asusten, pues muchos de ellos no están acostumbrados a la presencia humana, la interacción entre especies puede llevar a enfermedades, ya sea que los animales resulten contagiados por las personas o viceversa.
Como alternativa, los visitantes que deseen interactuar con animales en sus viajes deben hacerlo a través de guías y experiencias aprobadas.
Acercarse, pero sin abusar
En el Santuario de Perezosos, ubicado en la provincia de Limón sobre la costa Atlántica de Costa Rica, la cofundadora del lugar Judy Avey-Arroyo educa a los turistas que llegan de todo el mundo para aprender sobre los tiernos y peludos animales.
Durante su visita, los huéspedes pueden observar, aprender e interactuar con los perezosos, pero cargar a los animales está prohibido salvo para el personal médico.
Es un comportamiento que se puede encontrar en toda Costa Rica.
Alrededor de 1,7 millones de personas visitan el país cada año. Aunque el idioma oficial del país es español, la campaña #StopAnimalSelfies está en inglés porque la mayor parte de los turistas proviene de Estados Unidos y Canadá.
El país ha impulsado el ecoturismo de gran manera. En 2019, Costa Rica recibió el honor de Campeones de la tierra, el mayor reconocimiento ambiental que otorgan las Naciones Unidas.
No es solo sobre los perezosos
El fenómeno de las personas que usan animales salvajes para tomarse selfies ciertamente no es un problema que únicamente afectan Costa Rica.
A los visitantes de Maria Island, cerca de Tasmania en Australia, se les pide que firmen compromisos hacia los animales de que “no los perseguirán con su selfie stick, ni se acercarán demasiado a los bebés. No te rodearé, ni intentaré alzarte. Me aseguraré de no dejar basura ni comida”.
La promesa, que los guardaparques de Maria Island comenzaron a distribuir y publicar en enero de 2019, se debió a que demasiados turistas no pudieron resistir el encanto de abrazar y apretar a los lindos marsupiales.
“Estamos en la era de la selfie, y la gente quiere tomarse selfies en diferentes lugares y con personas y animales”, dijo John Fitzgerald, CEO de Tasmania Tourism, en ese momento a CNN Travel.
“Pedimos a las personas que respeten el hecho de que son animales salvajes”.