Moscú (CNN) – Al menos una persona murió después de que el único portaaviones de Rusia, el Almirante Kuznetsov, se incendió el jueves por la mañana durante trabajos de reparación en el puerto ruso de Murmansk, en el Ártico, según las agencias de noticias estatales rusas.
Otras 10 personas resultaron heridas y dos están desaparecidas, informó la agencia estatal de noticias rusa TASS.
El incendio estalló mientras soldadores participan en trabajos de mantenimiento en la primera unidad de potencia. Una gruesa columna de humo negro se vio salir de la cubierta superior.
El área afectada por el humo y el fuego cubría 120 metros cuadrados, dijo TASS.
El Almirante Kuznetsov es el buque de guerra más grande de la armada rusa y su único portaaviones.
El buque de guerra realizó su primer despliegue de combate en 2016, en el Mar Mediterráneo, cuando sus aviones de combate lanzaron ataques en Siria.
Pero el portaaviones ha presentado problemas desde su regreso a Rusia para mantenimiento.
En octubre pasado, una grúa cayó sobre el barco durante los trabajos de reparación, abriendo un agujero en la cubierta.
El accidente tuvo lugar después de una interrupción del suministro eléctrico que hizo que las bombas en el muelle flotante, que sostenía el portaaviones, se averiaran y la estructura se hundiera.
La instalación, conocida como PD-50, era uno de los muelles secos flotantes más grandes del mundo y el más grande de Rusia, con 330 metros de largo y un peso de más de 80.000 toneladas.
Después de la interrupción, el PD-50 se sumergió rápidamente, haciendo que dos grúas cayeran sobre la cubierta del barco ruso, dejando un agujero de 4 por 5 metros, dijo el medio estatal Sputnik.
Después de ese accidente, las autoridades rusas dijeron a los medios estatales que el daño no retrasaría las reparaciones en el Almirante Kuznetsov, que debían completarse para 2021.
El accidente del Kuznetsov es al menos el segundo incendio mortal de la armada rusa este año.
En julio, un incendio a bordo de un sumergible ruso de aguas profundas mató a 14 tripulantes. Los submarinistas murieron por inhalación de humo después de que se incendió la nave, que estaba realizando investigaciones en aguas territoriales rusas, según TASS.
Rusia luego dijo que los detalles de ese accidente eran un “secreto de estado” y no dio más información.