(CNN) – Una historia clásica de rivalidad entre perros y gatos dio un giro hacia lo ridículo en Lathrop, California, cuando un pastor alemán obligó a un gato negro a subirse a un árbol.
Luego, el perro llevó la persecución hasta el árbol.
El entusiasmo del pastor le jugó una mala pasada, ya que rápidamente se encontró atrapado en el árbol a solo unos metros de su enemigo felino, que tampoco podía hacer ningún movimiento.
Los bomberos que llegaron pronto descubrieron que debían rescatar no solo a un gato, sino también a un perro.
Incluso cuando los humanos serviciales alistaban la escalera, el perro parecía acercarse al gato descontento.
Los Bomberos del distrito de Lathrop-Manteca publicaron fotos de la penosa experiencia en su página de Facebook.
“Nos alegra saber que todo salió bien para este perro, y estamos bastante seguros de que lo pensará dos veces antes de perseguir a los gatos hasta otro árbol … ¡buen trabajo Máquina 35!”, decía el post.
Pero esperen.
¿Noticias sobre el perro y ni una sola mención de lo que pasó con el gato? El perro incluso tuvo una sesión de fotos después del rescate y no hay un gato a la vista.
Los amantes de los gatos no lo aceptarían.
Los bomberos publicaron una actualización en su página de Facebook después de recibir una lluvia de mensajes preguntando sobre el gato.
“Si bien no solemos actualizar o responder a los comentarios”, decía la publicación, “después de ver tanto interés por el bienestar del gato, sentimos que teníamos la responsabilidad de compartir las noticias”.
Para alivio de los amantes de los gatos, se informó que el gato estaba bien. Ahora podrá guardar una de sus nueve vidas para otro día.