Cortesía: Mari Rodriguez Ichaso

Nota del editor: Mari Rodríguez Ichaso ha sido colaboradora de la revista Vanidades por más de dos décadas. Especialista en moda, viajes, gastronomía, arte, arquitectura y entretenimiento. Productora de cine. Columnista de Estilo de CNN en Español. Las opiniones expresadas en este comentario son propias del autor. Ver más opinión en CNNe.com/opinion.

(CNN Español) – Sí, he escrito la palabra “necesarias”, porque en días que ya son una nueva rutina, en los que nos sentimos preocupadas, sin mucho entusiasmo y además llevamos mascarillas, guantes de goma y vivimos separados a dos metros de los demás, buscamos formas de animarnos y de sentir un poco de normalidad. En esa búsqueda, muchas de nosotras encontramos que llevar “joyería de fantasía” ¡nos alegra muchísimo el espíritu y nos realza el “look” sin grandes esfuerzos!

Y es importante recordar que esa joyería aporta exactamente lo que su nombre promete: “fantasía”, además de un muy necesario y rápido cambio de imagen.

Perlas y más…

Por ejemplo, unas perlas (aunque hayan costado poquísimo dinero y sean ¡100% falsas!) inmediatamente nos embellecen.

Por eso han sido favoritas de reinas, princesas y mujeres legendarias a través de los siglos, como la reina María de Inglaterra, la célebre reina de Francia, María Antonieta, la espía Mata Hari, la emblemática princesa Gracia de Mónaco, la primera dama Jacqueline Kennedy Onassis y la propia princesa Diana de Gales, quien usaba casi constantemente su bella gargantilla de perlas.

¡Basta con mirar las fotos! Un collar y unos zarcillos o aretes de perlas son las “joyas básicas” ideales. Proyectan elegancia, a la vez que sus tonos -del blanco puro al blanco crema (o con tonos dorados)- combinan con todo y realzan nuestra imagen a cualquier edad.

Para los meses que se avecinan, en los que una lógica austeridad y simplicidad marcan la moda que llevaremos, ya sea para quedarnos en casa o regresar paulatinamente a las oficinas y trabajos, el uso de bonitos accesorios nos alegra el espíritu y realza nuestro amor propio. ¡Vernos bien arregladas es superpositivo para todas nosotras!

¿Otras joyas de fantasía básicas?

Los collares de cadenas doradas y los de eslabones grandes; aretes que son sencillos aros dorados (Jennifer López los usa mucho); unos zarcillos largos, de piedras de cristal que imitan divinos rubíes, esmeraldas o zafiros te embellecen al instante. O también aretes y collares de conchas o de cuentas de madera; collares, aretes y pulseras de artesanía (en México hacen maravillas) y, en general, las piezas de bisutería con materiales ligeros y muy nuevos como plásticos, resinas ¡y hasta plumas!

Hay algo encantador en llevar el conjunto más sencillo y adornarlo con accesorios que nos gusten mucho y nos hagan felices con tan solo verlos.

Esto lo comprobé recientemente organizando mis gavetas y me dio mucha alegría encontrar piezas de fantasía compradas en mis viajes. ¡Fue como encontrar viejas amigas! Algunas me transportaron al mercado de artesanías La Ciudadela, en México, y otras a un mercado de pulgas en París. Muchas de ellas me recordaron a mis tiendas favoritas en Nueva York, mientras otras eran de mi madre, que poco a poco me las fue regalando.

Lindos recuerdos. Mano a mano con la belleza de sus piedras preciosas y enormes “brillantes”, esta bisutería puede ser, sin duda, nuestra gran aliada en los próximos meses. Y te animo hoy mismo a revisarlas, desempolvarlas, limpiarlas y dejarlas listas para que inmediatamente alegren tu imagen.