(CNN) – La organización Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) indicó el sábado en su cuenta de Twitter que casi un centenar de personas provenientes desde Panamá recibieron “maltrato” y se quedaron “varadas arbitrariamente” en la frontera sur.
El Cenidh detalló que por medio de entrevistas conoció que autoridades pidieron a los solicitantes su número de teléfono y dirección, y que no se les ofreció explicación alguna sobre la causa del retardo.
Las personas habrían permanecido en la Frontera de Peñas Blancas, aproximadamente a 220 kilómetros al sur de Managua.
Vilma Núñez, presidenta del Cenidh, dijo a CNN que el único requisito para que cualquier nicaragüense ingrese a su país es mostrar su cédula de identidad o pasaporte vigente.
Según Núñez, las autoridades migratorias no explicaron las razones del bloqueo al ingreso, y añadió que en caso de ser por razones sanitarias, el gobierno no ha declarado ningún requisito para quienes ingresan, salvo la medición de la temperatura.
La activista afirmó que las personas viajaron a Panamá en distintas fechas y que trabajaban en distintas labores, y que se encontraban este sábado en territorio nicaragüense a la espera de una de una respuesta de migración para ir a sus hogares.
CNN no ha verificado que las supuestas víctimas de maltrato cuenten con la documentación requerida para ingresar a Nicaragua.
CNN consultó sobre la denuncia a la Dirección de Migración y al Consejo de Comunicación y Ciudadanía, coordinado por la vicepresidenta Rosario Murillo, pero hasta el momento no han respondido a la solicitud.