Trump está bloqueando la mayoría de caminos legales para inmigrar a Estados Unidos
(CNN) -- A medida que el coronavirus se extendió por todo el mundo, el Gobierno de Donald Trump ha obstruido constantemente la mayoría de vías para la inmigración legal a Estados Unidos, al cerrar eficazmente el sistema que atrae a cientos de miles de inmigrantes anualmente.
En un periodo de cuatro meses, las personas que migraron legalmente a Estados Unidos ––o tratan de hacerlo–– han visto sus vidas desarraigadas en medio de una letanía de cambios atribuidos a la pandemia. Las reformas abruptas han dejado a los inmigrantes y a sus familias en el limbo: confundidos, frustrados y luchando por definir sus próximos pasos.
Las razones proporcionadas por la administración de Trump varían, y van desde proteger a los trabajadores estadounidenses en un momento en que la tasa de desempleo es alta hasta priorizar la salud pública.
Esta semana, el futuro de más de un millón de estudiantes internacionales que asisten a universidades en Estados Unidos se volvió incierto. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) anunció este lunes que los alumnos extranjeros que solo toman cursos en línea ––los cuales cada vez son más comunes a medida que las universidades eligen esta opción en lugar de las clases presenciales en medio de la pandemia–– podrían necesitar cambiarse de institución o abandonar el país.
Entre ellos está Shreeya Thussu, de 21 años.
Durante tres años, esta estudiante último año en la Universidad de California en Berkeley vivió y estudió en Estados Unidos. Ahora, el lugar al que llama hogar podría deportarla, dependiendo de su carga de cursos en la universidad.
"Realmente no sabemos lo que está sucediendo. Todos están tratando de encontrar maneras para programar una clase presencial, pero no hay muchas opciones", le dijo a CNN Thussu, quien se desempeña como presidenta de la Asociación de Estudiantes Internacionales de Berkeley.
Apenas unos días atrás, empresas y trabajadores extranjeros pasaron por un estado de preocupación similar, mientras que muchas personas que intentaban llegar a Estados Unidos con tarjetas de residencia (las llamadas green cards) se enteraron de que eso no será una posibilidad durante el resto del año. Y antes de eso, la administración de Trump prohibió en gran medida la entrada de inmigrantes, incluidos niños y solicitantes de asilo.
Activistas, abogados y expertos de inmigración dicen que no hay duda de que el Gobierno está aprovechando la pandemia para revisar el sistema de inmigración, y señalan en parte una serie de cambios recientes que bloquean la llegada de inmigrantes altamente calificados que la administración ha dicho en repetidas ocasiones que quiere recibir en Estados Unidos.
"Se esperaría que durante esta masiva crisis económica y de salud pública se dejara de lado la agenda del Gobierno, pero en cambio ha sido tan agresiva como siempre, si no más", dijo Sarah Pierce, analista de políticas del Instituto de Política Migratoria, un grupo de expertos con sede en Washington.
Los que están en el blanco de estos cambios sufren las consecuencias.
"Quedé en estado de shock"
El anuncio de ICE esta semana acerca de prohibir a los estudiantes extranjeros tomar únicamente cursos en línea en Estados Unidos sorprendió a muchos, después de que la agencia se hubiera mostrado más flexible en la primavera.
"Quedé en estado de shock", dijo a CNN Valeria Mendiola, una estudiante de la Universidad de Harvard. "Planeamos nuestras vidas de acuerdo a eso (a las directivas que estaban vigentes). Trabajamos muy duro para llegar aquí y luego esto sucede en el medio de toda nuestra experiencia", contó.
Los requisitos de visa para los estudiantes siempre han sido estrictos, y está prohibido viajar a Estados Unidos para tomar solo cursos en línea. Según las normas, que los funcionarios argumentan fueron diseñadas para maximizar la flexibilidad, los estudiantes pueden permanecer inscritos en universidades que ofrecen clases en línea, pero no se les permitirá hacerlo y quedarse en Estados Unidos.
"Si una escuela no va a abrir o si va a estar 100% en línea, entonces no esperaríamos que la gente esté aquí para eso", dijo el subsecretario interino de Seguridad Nacional, Ken Cuccinelli, a Brianna Keilar de CNN.
Antes del anuncio del ICE, Harvard había informado que todos sus cursos se impartirían en línea durante el semestre de otoño.
Mendiola dice que ella y otros compañeros de clase ahora están presionando a la universidad para que reconsidere y ofrezca más clases presenciales. Si eso no sucede, teme no tener más remedio que regresar a México. Eso la deja con una lista de preocupaciones que crece a cada hora: ¿qué pasará con su departamento y el contrato de arrendamiento que ya firmó? ¿Con sus muebles? ¿Y con sus préstamos estudiantiles?
"Si pido una licencia, podría perder todos mis préstamos y todas mis becas", explicó Mendiola. "Es muy difícil obtener el dinero suficiente para estar aquí en primer lugar", agregó.
Harvard y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) demandaron este miércoles al gobierno el miércoles por su decisión.
La inmigración legal, al borde de detenerse
En el transcurso del gobierno de Trump, la administración ha revisado el sistema de inmigración de Estados Unidos, destripando el asilo, reduciendo el número de admisiones de refugiados a mínimos históricos y restringiendo severamente la inmigración legal, entre otros cambios.
La pandemia de coronavirus aceleró aún más los ajustes al sistema que anteriormente habían luchado por ganar impulso, como prohibir en gran medida la entrada de solicitantes de asilo en la frontera entre Estados Unidos y México, y proponer bloquear a los solicitantes de asilo por razones de salud pública.
"Durante la pandemia, hasta ahora, este Gobierno ha puesto fin efectivamente al asilo en la frontera sur", sostuvo Pierce. "Disminuyeron drásticamente la inmigración legal en el país, especialmente la inmigración basada en vínculos familiares. Han detenido efectivamente la lotería de visas de diversidad y han disminuido significativamente el número de trabajadores extranjeros temporales que entran en el país", agregó.
En una serie de órdenes de la Casa Blanca sobre inmigración en abril y junio, el Gobierno suspendió gran parte de la inmigración basada en vínculos familiares y varias visas de trabajadores temporales hasta el final del año, con algunas excepciones. El Instituto de Política Migratoria estimó que unos 167.000 trabajadores temporales serán mantenidos fuera de Estados Unidos y 26.000 tarjetas de residencia serán bloqueadas mensualmente.
- LEE: La administración de Trump propone bloquear a los solicitantes de asilo por razones de salud pública
Como resultado de la pandemia, consulados en el extranjero tuvieron que cerrar, lo que hace casi imposible que las personas fuera de Estados Unidos obtengan visas. Desde enero, el número de visas para no inmigrantes emitidas se ha desplomado en un 94%.
Las consecuencias son muy variadas.
Nandini Nair, socia de inmigración en la firma de abogados Greenspoon Marder con sede en Nueva Jersey, representa a una gama de empresas, incluidas compañías de tecnología, mercadeo y contabilidad, así como consultorios médicos y dentales.
"Tengo empresas que están pensando que esto es el fin: no vamos a trasladar a nadie más", dijo Nair.
Sandra Feist, una abogada de inmigración radicada en Minnesota, también dijo que profesionales de recursos humanos se comunicaron en nombre de sus empresas preocupados por los empleados que planeaban incorporar. Feist recordó una conversación en la que le dijeron que si la compañía no podía llevar a su jefe de operaciones a Estados Unidos, "eso será la perdición para ellos".
Al igual que con los cambios que precedieron al anuncio del lunes, a algunos les preocupa que el Gobierno esté marcando el tono equivocado y pueda alentar a los estudiantes extranjeros a comenzar a buscar en otros lugares. Ese puede ser el caso de Vitor Possebom, un brasileño que está obteniendo su doctorado en Economía en Yale.
"De antemano, diría que permanecer en Estados Unidos fue mi primera opción para mi carrera", dijo. "Ahora, para ser honesto, Canadá, Europa, Nueva Zelandia y Australia parecen opciones mucho mejores", opinó.
Thussu, quien había planeado postularse a facultades de Medicina en Estados Unidos, dijo que cada vez más siente que el país donde quería construir un futuro la ve como "desechable".
"Escuchas cosas como esta. Ha estado sucediendo por un tiempo, como las suspensiones (de las visas) H-1B para el resto de este año que se anunciaron recientemente. Simplemente está creciendo", dijo Thussu. "Ha sido cada vez más aterrador... Cada vez se siente menos como casa", explicó.