Tulsi Gabbard habla ante Donald Trump en un mitin de campaña en el Madison Square Garden en octubre en Nueva York. Crédito: Alex Brandon/AP

(CNN) – Tulsi Gabbard, la persona elegida por Donald Trump para liderar la comunidad de inteligencia, fue incluida brevemente en una lista de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, por sus siglas en inglés) que requiere controles de seguridad adicionales antes de los vuelos, después de que sus patrones de viajes al extranjero y sus conexiones con el extranjero desencadenaran un algoritmo del Gobierno a principios de este año, según dijeron a CNN tres fuentes familiarizadas con el asunto.

Gabbard fue retirada rápidamente de la lista, un programa poco conocido denominado “Quiet Skies” o “Cielos tranquilos”, tras hacer públicas sus afirmaciones de que había sido incluida en una “lista secreta de vigilancia terrorista”.

Gabbard aseguró que fue incluida en la lista porque había criticado a la entonces candidata presidencial Kamala Harris en una entrevista con Fox News, algo que dos de las fuentes negaron rotundamente que tuviera algo que ver.

“La TSA me incluyó en la lista de vigilancia terrorista nacional ‘Cielos tranquilos’ en lo que solo puedo describir como la traición definitiva”, dijo en una publicación en X en septiembre. “El régimen de Harris-Biden me ha etiquetado ahora como amenaza terrorista nacional. ¿Por qué? Me ven como una amenaza para su poder”.

El episodio ha levantado ampollas entre los funcionarios de seguridad, que señalan el historial de Gabbard de relaciones inusuales en el extranjero. Como miembro del Congreso en 2017, trabajó fuera de los canales oficiales para viajar a Siria y reunirse con el presidente Bashar al-Assad.

CNN contactó a Gabbard para obtener comentarios.

Las circunstancias que llevaron a la inclusión de Gabbard en el programa ‘Cielos tranquilos’ pueden ser totalmente benignas, dijeron estas fuentes. Pero que un candidato a un alto cargo, mucho menos la directora de inteligencia nacional, aparezca en una lista de vigilancia del gobierno de cualquier tipo es muy inusual, si no sin precedentes, dijeron varios funcionarios estadounidenses.

En circunstancias normales, dijo un funcionario, Gabbard se vería obligada a explicar los viajes al extranjero y los contactos en cuestión durante la verificación de sus antecedentes.

Pero Trump ha indicado que podría evitar el proceso normal de verificación de antecedentes para sus principales candidatos, lo que plantea interrogantes sobre lo que se le pedirá a Gabbard que revele, si es que se le pedirá algo, o si los funcionarios de seguridad nacional tendrán siquiera la oportunidad de evaluar si la conducta de Gabbard planteaba algún riesgo.

El algoritmo del programa Cielos tranquilos examina los patrones de viaje, las conexiones con el extranjero y otros datos en una serie de registros gubernamentales y, si se activa, da lugar a un control de seguridad adicional en el aeropuerto por parte de los funcionarios de seguridad. Pero no está asociado a la lista de vigilancia terrorista del FBI. Funcionarios de seguridad de varias agencias dijeron a CNN que el programa es conocido dentro del gobierno por tener normas mucho más laxas para su inclusión.

La TSA no confirmó si Gabbard estaba en la lista cuando CNN le preguntó, pero señaló que el programa “no es una lista de vigilancia terrorista”.

“La TSA utiliza procesos de seguridad de múltiples capas para proteger los sistemas de transporte de la nación para garantizar la libertad de movimiento de las personas y el comercio”, dijo la agencia en un comunicado. “El programa Cielos tranquilos de la TSA utiliza un enfoque basado en el riesgo, aleatorio e impredecible para la seguridad del transporte, para incluir la identificación de pasajeros y la aplicación de medidas de seguridad reforzadas”.

La declaración continuó: “El programa Cielos tranquilos de la TSA, que no es una lista de vigilancia terrorista, aprovecha la información de inteligencia y las bases de datos del Gobierno de Estados Unidos para aplicar medidas de control a un número limitado de pasajeros durante un periodo de tiempo limitado. La mera coincidencia con una norma basada en el riesgo no constituye información despectiva sobre un individuo”.

El episodio añade otro espectro de incertidumbre a un candidato cuyo historial de posiciones poco ortodoxas en política exterior, en particular declaraciones públicas que, según los críticos, se hacen eco de los temas de conversación rusos, ya ha incomodado profundamente a algunos senadores del Partido Republicano.