(CNN Radio Argentina) – El exdiputado nacional Nicolás Massot afirmó este sábado en CNN Radio que “hay que ser inmaduro políticamente para pensar que Horacio Rodríguez Larreta deja de ser opositor por coordinar políticas con el Presidente”, a la vez que indicó que “la pandemia trastoca los roles: los dirigentes con responsabilidad de gestión de Juntos por el Cambio abandonan su rol de opositores críticos para coordinar políticas” con el oficialismo y otras fuerzas “del partido que sean”, lo cual –remarcó– “es muy bueno y auspicioso”.
En el programa Digamos todo, el exjefe del bloque del PRO en la Cámara de Diputados y actual director del Banco Ciudad señaló al Reino Unido y a Estados Unidos como dos democracias “bipartidistas”, en las cuales, ejemplificó, “por más que tengan diferencias muy marcadas entre los partidos, nadie piensa que un alcalde que coordina con el primer ministro es un traidor a sus valores”.
En diálogo con Nacho Girón y Nuria Am, Massot manifestó que la coyuntura de la Argentina en medio de la pandemia “es la prueba de que siempre se puede estar peor”, al tiempo que sopesó: “Antes del COVID, la situación del país era crítica y ahora es dificilísima. En la primera etapa de este gobierno lo sanitario se llevó el ciento por ciento de la atención. No fueron malos la reacción ni los resultados”.
“El Gobierno se equivocó en algunos puntos con los problemas económicos. Estamos en una híper recesión y sin recursos para paliar la crisis. No tenemos acceso a los mercados”, deslizó en otro tramo de la entrevista. “Los que no hayan perdido su trabajo, igual van a perder por el impuesto inflacionario”, avizoró.
“La oposición le dio el beneficio de la duda al Gobierno, como corresponde. Hizo una pausa en la crítica. Sería bueno que la coordinación sanitaria se trasladara a todos los temas”, agregó. Y, consultado sobre la posición del núcleo duro del PRO sobre el accionar del jefe de Gobierno porteño, el exlegislador comentó: “No creo que haya que decir que Larreta está al lado de Alberto Fernández. Es un gobernador electo a lado de un presidente electo. Cualquier otra opinión significa desconocer la realidad. Hay que desterrar prejuicios. Hace veinte años que tenemos los mismos problemas. Los problemas de Cristina Kirchner, los de Mauricio Macri y los que hoy padece Alberto Fernández son bastante parecidos. Hoy tenemos que estar coordinando todos los partidos en el Congreso la negociación por la deuda. La Argentina debe darle al Fondo Monetario Internacional un plan económico de manera consensuada. Por eso hay que compartir un rumbo”, analizó.
Según Massot, la oposición está “totalmente unida”, aunque “la unidad no significa unanimidad de criterios”. Y citó el caso Vicentin como “ejemplo de las virtudes del sistema” al resaltar que generó “una resistencia tripartita: la oposición unida en el Congreso, un Poder judicial independiente y la sociedad alerta que no dudó en salir a la calle. En el Gobierno hubo un reconocimiento del error y una marcha atrás”.
“El sistema bipartidista es fuerte. En Juntos por el Cambio han aflorado varios líderes: es una coalición”, dijo. Y enumeró: “Además de Macri y de Lilita Carrió, surgen nombres como los de Martín Lousteau, Emilio Monzó, María Eugenia Vidal, Rogelio Frigerio y Alfredo Cornejo”, de los cuales podría emerger una eventual fórmula electoral, evaluó.
“Juntos por el Cambio no depende de una o de dos figuras. Macri habló de consolidar liderazgos. La figura de un expresidente siempre es complicada: el resto del sistema no le permite ocupar el rol de transmisor de experiencias”, sostuvo.
“Sin lugar a dudas, en Juntos por el Cambio tenemos un futuro electoral. Y hay un presente. Se reconfigura el sistema bifrentista, con dos fuerzas que se van a alternar en el poder de manera sucesiva durante las próximas décadas”, amplió.
Por último, se refirió a la reforma judicial que impulsa el oficialismo: “Hay cuestiones que se deberían poder consensuar”. Sin embargo, le “preocuparía” –expuso– que esta reforma fuese direccionada.